Editorial
La vuelta de un verano difícil
Venimos de uno de los peores periodos de incendios que se recuerdan: ocho víctimas mortales, incontables bienes afectados y casi 400.000 hectáreas quemadas (un área superior a la de toda la isla de Mallorca), de las que un 9 % son tierras de cultivo. Ya no arde el monte, y parece que empieza también a enfriarse el debate sobre las condiciones que multiplican el poder devastador de estos incendios de cuarta y quinta generación. Más allá de polémicas ―interesadas― sobre el perfil de los incendiarios cuando no son por causas naturales, o sobre los recursos técnicos y humanos para extinguirlos ―que han copado horas de TV en los grandes medios― es relevante atender a las razones de su enorme intensidad y rapidísima propagación, donde confluyen factores sociológicos crónicos (la despoblación y el consiguiente abandono y densificación del monte); climáticos (temperaturas que en adelante serán norma y no excepción); y cuestiones relativas a la gestión del territorio, a su titularidad y a su (des)aprovechamiento forestal. Atender todas estas claves y apostar por el fortalecimiento del tejido social en el medio rural, tal como siempre hemos defendido, podría ayudar a dar con soluciones más eficaces a medio y largo plazo.
Este verano concurrieron también dos anuncios de indudable influencia en el agro europeo: el acuerdo firmado entre la Comisión Europea y la administración Trump, que va a acarrear aranceles del 15 % para casi todas las exportaciones europeas a los Estados Unidos, y el arranque del nuevo marco financiero plurianual para la Unión 2028-2034, que redefiniría la forma de financiación de la futura PAC y ha suscitado fuertes reacciones en el campo español. Ambas cuestiones podrían tener aún un largo recorrido.
En presente, la revista trata en este número de otoño varios retos que el sector agroalimentario está ya afrontando, como el de mejorar la formación y profesionalización de nuestro medio agrario; es un objetivo de la nueva Estrategia del MAPA ‘Siembra, Crece y Cosecha tu Futuro’, de la que hablamos en uno de nuestros Reportajes. O la Innovación que están desarrollando varios grupos operativos para valorizar o reutilizar recursos como las microalgas o el alpechín en la fertilización de los cultivos.
Mostramos los enfoques sostenibles de dos explotaciones en entornos muy diferentes: La Junquera, en Murcia, que se ha convertido con sus cursos sobre agricultura regenerativa en un referente internacional en la materia; y la gallega Trasdeza Natur, productora ecológica de snacks de frutas y verduras con su propio horno solar (ver Explotaciones Sostenibles y Cadena de Valor). Son dos ejemplos locales de un marco agroecológico sobre el que hemos charlado a nivel macro con la experta en sistemas alimentarios Marta Rivera Ferre en la interesante Entrevista que nos ha concedido.
Y entre el resto de contenidos, no dejamos de tratar en este número el relevo generacional, esta vez a través de los jóvenes truficultores de Teruel (Jóvenes en Red) y su aspiración de una marca nacional para la trufa negra. Ni tampoco de hablar de proyectos de grupos de acción local, como la estrategia que ha aunado a todos los grupos de Extremadura para llevar a un nivel comarcal el enfoque municipalista de la estrategia europea Smart Rural (Territorio Leader). Esa misma mirada hacia la necesidad e importancia de las redes medianas, llevada a la distribución alimentaria, es un factor clave en el proyecto Madrid Rural, sobre el que expertos del IMIDRA escriben en la sección de Opinión, como ejemplo de canales cortos de comercialización. Esperamos que disfrutes de la lectura.