El firme compromiso de los socios de Cooprado con los valores sociales del cooperativismo fue el origen de su Fundación. Con ella, la cooperativa se ha dotado de un instrumento con el que trabajar a favor de la integración social, la innovación, el desarrollo rural y la divulgación del mundo agro. Uno de los principales retos de la entidad es favorecer el relevo generacional en el sector primario, y para ello está desarrollando proyectos como la Escuela de Pastores o el Espacio Test de Cooprado, dos iniciativas innovadoras que se llevan a cabo en su propia granja experimental.
La sociedad Nuestra Señora del Prado (Cooprado) es una cooperativa extremeña dedicada, principalmente, a la alimentación animal y a comercializar las producciones de sus socios. No obstante, es algo más que un lugar donde comprar pienso y realizar trámites. También es una entidad comprometida con la búsqueda de soluciones estratégicas frente a los retos del sector. Por ello, y desde hace años, la cooperativa desarrolla distintos programas sociales y formativos, enfocados a acercar el campo y el mundo rural a la sociedad.
La Fundación Cooprado, entidad sin ánimo de lucro, surge de la necesidad de consolidar estos proyectos y alinearlos con sus principios de inclusión, economía social, valorización de la actividad agroganadera y fomento del desarrollo rural. Sus principales líneas de actuación son la investigación y la innovación en el ámbito agroalimentario, la capacitación y formación y la acción solidaria. Desde su nacimiento en 2018, asumió, además, el reto de favorecer la incorporación de jóvenes al sector primario y cooperativista.
Este relevo generacional es uno de los principales desafíos del sector, y Cooprado y la fundación lo abordan desde varios enfoques. En el plano formativo, cabe destacar la experiencia de Cooprado en el Programa CULTIVA, del MAPA, que facilita la estancia gratuita de jóvenes profesionales agrarios en explotaciones modelo para que adquieran nuevos conocimientos técnicos y conozcan otros sistemas de gestión aplicables a su actividad. En 2022, nuestra granja experimental, ubicada en el Casar de Cáceres, fue una de estas explotaciones de acogida y recibió a los jóvenes ganaderos Miguel García y Toni Seguí, procedentes de Ciudad Real y Mallorca. El intercambio de conocimiento entre cooperativa y participantes ha favorecido la creación de redes de apoyo que se han mantenido en el tiempo. [...]
Texto y fotografía: Fundación Cooprado