La Política Agraria Común, crucial, y a veces controvertida, representa una tercera parte de todo el presupuesto de la UE. En España, lleva influyendo significativamente en la agricultura y desarrollo rural desde 1986, y ha venido afrontando en estos años diversos retos sobre la gobernanza y la sostenibilidad ambiental, social y económica. La nueva PAC, mucho más ambiciosa en el plano ambiental, supone un reto de adaptación para muchos agricultores. Se requieren innovaciones para adaptarse al cambio climático y mejorar la competitividad, mientras se promueve la incorporación de jóvenes y mujeres al sector agrario para combatir la despoblación rural.
La Política Agraria Común (PAC) es uno de los programas más importantes y controvertidos de la política comunitaria. En 2021, representó el 33,2% del presupuesto total de la UE, 55.713 millones de euros. España, donde la PAC ha generado un impacto significativo en su agricultura y desarrollo rural desde su adhesión a la UE en 1986, enfrenta en el nuevo periodo una serie de retos ambientales, sociales, económicos y de gobernanza.
“La PAC incluye medidas de apoyo a jóvenes y mujeres, pero quedan retos como flexibilizar el mercado de la tierra y mejorar el acceso de los jóvenes a la financiación”
El reto medioambiental ha sido uno de los principales ejes de la nueva PAC, que contribuye significativamente al Pacto Verde Europeo con una protección más ambiciosa del medio ambiente y el clima respecto al periodo 2014-2020. Esta reforma aumenta las exigencias en algunas prácticas agrarias, requiriendo a los agricultores adoptar técnicas más sostenibles y respetuosas con el medio ambiente. Ante el cambio climático y el deterioro de algunos ecosistemas ligados a la agricultura, la actividad agraria puede jugar un papel determinante en la mitigación del cambio climático por su capacidad de secuestrar carbono.
Sin embargo, algunas medidas de esta PAC han sido percibidas como una amenaza para el sector, y han generado fuertes protestas de los agricultores, que consideran que este nuevo marco les resta competitividad frente a terceros países. En respuesta, la UE ha relajado sus requerimientos iniciales en la reducción de pesticidas. […]
Texto: Eva Iglesias y Margarita Brugarolas, presidentas de la Asociación Española de Economía Agroalimentaria
