
02 de Junio de 2025
El distintivo de calidad impulsa su posición en el mercado nacional e internacional
- En los últimos años, el cultivo de aguacate en el archipiélago ha experimentado un importante crecimiento
- El distintivo de calidad impulsa su posición en el mercado nacional e internacional
El “Aguacate de Canarias” ha alcanzado un hito histórico al convertirse en el primer aguacate del mundo en obtener la Indicación Geográfica Protegida (IGP). Esta distinción, publicada el 22 de abril en el Diario Oficial de la Unión Europea (DOUE), reconoce la calidad y singularidad del aguacate cultivado en el archipiélago canario, vinculando su sabor y características únicas al clima, suelo y saber hacer local.
Esta distinción coloca al aguacate de Canarias al mismo nivel que el ya consolidado “Plátano de Canarias” y fortalece la posición de España como el tercer país con mayor número de productos agroalimentarios protegidos en Europa, con un total de 221 figuras de calidad diferenciada.
Un cultivo en auge y con gran potencial
La producción de aguacate en las Islas Canarias ha experimentado un notable crecimiento durante la última década. Según datos oficiales del Instituto Canario de Estadística (ISTAC):
- La superficie cultivada se ha duplicado hasta superar las 2.400 hectáreas en 2023.
- La producción supera las 14.600 toneladas en el mismo año.
- El crecimiento anual medio se estima en aproximadamente un 8 %.
Este aumento generalizado responde a las condiciones óptimas que ofrece el archipiélago: el clima subtropical con estaciones bien definidas y suelos volcánicos ricos en nutrientes que permiten obtener frutos de alta calidad con características organolépticas singulares, es decir, cualidades percibidas sensorialmente como el sabor, el aroma, la textura y el aspecto.
Además, se prevén importantes perspectivas de desarrollo y rentabilidad para los agricultores locales en la Asociación de Organizaciones de Productores de Aguacate de Canarias (ASGUACAN).
Condiciones del distintivo de calidad
La nueva IGP asegura que solo los aguacates cultivados en Canarias bajo unas condiciones estrictas de producción puedan utilizar esta denominación:
- Cultivo en suelos volcánicos, que aportan minerales y una estructura que favorece la aireación y retención hídrica.
- Clima con estaciones diferenciadas, que permite una maduración lenta y uniforme del fruto en el árbol, mejorando la textura y el sabor.
- Prácticas agrícolas sostenibles como el acolchado con pinocha, compost o estiércol que mantienen la humedad y la biodiversidad del suelo.
- Recolección manual para evitar daños en el fruto y asegurar que se coseche en su punto óptimo de madurez.
- Control de calidad riguroso desde la cosecha hasta el envasado, garantizando un producto fresco y homogéneo.
Estas prácticas no solo contribuyen a la excelencia organoléptica del aguacate, sino que también protegen el entorno natural, promoviendo la agricultura sostenible y el cuidado del paisaje rural.
Variedades protegidas
La IGP abarca 6 variedades que se cultivan en el archipiélago, cada una con rasgos particulares que enriquecen la oferta y permiten satisfacer diferentes preferencias del consumidor:
- Hass.
- Fuerte.
- Orotava.
- Pinkerton.
- Reed.
- Carmen.
Para que un aguacate pueda comercializarse bajo la IGP, debe cumplir no solo con los requisitos morfológicos sino también con estándares estrictos de textura, integridad y frescura.