23 de Mayo de 2017
El estudio “Las producciones alimentarias de montaña en España” destaca el potencial de las zonas de montaña para desarrollar sistemas alimentarios sostenibles.
España es un país con un relieve elevado y abrupto en muchas zonas, una orografía montañosa si la comparamos con el resto de países de Europa, dónde sólo le superan Suiza y Austria. Los sistemas montañosos de España son muy numerosos y ocupan casi la mitad del territorio nacional. De hecho, este estudio ha confirmado que el 38% de los municipios españoles están incluidos en las definidas como “zonas de montaña” y que, además, se encuentran distribuidos en todas las comunidades autónomas y en 49 de las 50 provincias españolas.
El objeto de este estudio es evaluar los potenciales productivos de los alimentos de montaña y la viabilidad de usar en España el término facultativo “producto de montaña”. El estudio subraya que las montañas españolas tienen un gran potencial para desarrollar un sistema alimentario sostenible.
Sin embargo, actualmente este gran potencial productivo no se traduce en nuestro país en un alto rendimiento económico, en comparación con otros países europeos. Las causas de esta realidad las encontramos en que los sistemas de producción de montaña no se pueden mecanizar masivamente, tal como se ha hecho en las zonas llanas y regables, que se convierten así en una fuerte competencia. Otros obstáculos son la falta de renovación generacional y la identificación poco clara de los productos de montaña en el mercado. Estos problemas se han traducido en un escaso aprovechamiento de las superficies agrarias útiles de montaña y en una falta de consideración de sus productos como garantía de sostenibilidad y de calidad.
Los municipios de montaña cuentan con una agricultura y una ganadería que producen alimentos de calidad, al tiempo que favorecen la protección y conservación de los entornos naturales montañosos y de la biodiversidad que albergan y contribuyen al desarrollo económico y social de las personas que viven allí, haciendo frente al abandono y despoblamiento de estos territorios. De esta manera, poner en valor sus productos siempre será una ayuda para potenciar el papel que juega la ganadería y la agricultura de montaña y asegurar su continuidad.
El estudio, disponible en este enlace, ha sido realizado por el Ministerio en colaboración con Mensa Cívica.
Producto de montaña
La Unión Europea publicó en 2014 el Reglamento Delegado (UE) nº 665/2014 del Parlamento Europeo y del Consejo en el que se establecían las condiciones de utilización del término de calidad facultativo “producto de montaña”. Con esta iniciativa se quiere desde Europa poner en valor las producciones de estos territorios.
En la realización de este estudio se han identificado a los grupos de productoras/es susceptibles de acogerse a una diferenciación mediante el uso del término facultativo “producto de montaña” según esta reglamentación europea. El uso de este término podría servir como garantía de protección y promoción de estos productos, así como, para aumentar su valor añadido, basado principalmente en aspectos de calidad, biodiversidad y territorio.
En otros países europeos, como Suiza, Francia e Italia, ya se viene utilizando “producto de montaña”, sujeto a una normativa nacional que regula su uso con el fin de aumentar la transparencia hacia los consumidores y garantizar que todas las fases de la producción y elaboración de estos productos se hayan realizado en zonas de montaña.
Las fuentes utilizadas para realizar este trabajo fueron, en primer lugar, los datos obtenidos gracias a la participación de los grupos de productores, federaciones, asociaciones (como la Asociación Española de Municipios de Montaña), investigadores, grupos de acción local de cada comunidad autónoma y las administraciones central, autonómicas y locales. Uno de los instrumentos que más se ha utilizado para recoger y sistematizar la información ha sido la realización de varias encuestas dirigidas a las administraciones autonómicas de agricultura, ganadería y desarrollo rural y a los productores de alimentos de montaña que cumplieran con los requisitos establecidos por la Unión Europea para la utilización del término de calidad facultativo “producto de montaña”.
Entre las finalidades de este trabajo está también elaborar una base de datos que permita evaluar la situación de los productos de montaña en España de cara a elaborar las alegaciones al Pliego de condiciones de Compras verdes de la Unión Europea que verá la luz a mediados de 2017.