Existen diversas técnicas que promueven cultivar la tierra bajo criterios más sostenibles: la agricultura de conservación, la producción integrada, la agricultura orgánica... Sin embargo, hay un concepto que integra varias de estas prácticas: la “agricultura regenerativa”, una forma holística de manejar los cultivos, que incluye la introducción del ganado, con el objetivo principal de la mejora integral del suelo y su microbiota. Así viene trabajando Jesús Burillo, quien junto con su hermano gestiona una explotación agraria en María de Huerva, en la Comarca Central de Zaragoza.
Apasionado del ganado ovino y obsesionado por la mejora de la microbiota del suelo. Así se puede definir a Jesús Burillo, un ganadero aragonés que gestiona con su hermano 200 hectáreas de secano (triticale, centeno, avena y cebada), 18 de regadío (cereal para sus propias semillas, algunos frutales, y forrajeras como festuca alta, alfalfa y raygrass) y un rebaño de 250 ovejas, en la localidad zaragozana de María de Huerva, a unos pocos km al sur de su capital. Su finca forma parte de las inscritas en la Asociación de Agricultura Regenerativa, y actualmente se encuentra en fase de adaptación de sus parcelas a las prácticas regenerativas.
Una de estas prácticas, muy asociada a la agricultura orgánica, es la fabricación propia de biopreparados para mejorar el suelo, en los que mezclan diferentes tipos de estiércoles, abonos fermentados y caldos minerales, y a los que también añaden harinas de roca. "Empleamos técnicas de la agricultura orgánica para mejorar el compostaje", apunta Burillo, quien añade que "para que estos biopreparados funcionen mejor es importante que las bacterias en el compostaje sean autóctonas, es decir, nativas de la misma zona”. […]
Texto y fotografía: Elisa Plumed Lucas